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Discurso

Participación del Presidente Gustavo Petro en la Cumbre de Ambición Climática

Eliminar por completo subsidios a los combustibles fósiles en el mundo, propuesta del presidente Gustavo Petro en la Cumbre de Ambición Climática

Foto: Juan Diego Cano - Presidencia

Participación del Presidente Gustavo Petro en la Cumbre de Ambición Climática

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Nueva York, 20 de septiembre de 2023

Yo vengo de Colombia, un país que exporta carbón. El quinto exportador mundial de carbón y petróleo. Más del 60% de sus exportaciones son combustibles fósiles, depende de eso. Vive de eso desde hace 40 años. 

Sin embargo, diría que, el objetivo real que todos los países deberíamos tener es tender a cero, en el corto plazo, la producción y la demanda de petróleo, de carbón y de gas. Si no, no se salva la vida. 

Si esto se reproduce en Colombia, dicen, Petro es suicida, porque el país vive de eso. 

Pero el país no puede vivir de eso, porque simplemente, el petróleo, el carbón y el gas en la atmósfera significa que nadie puede vivir en el planeta, ni siquiera la gente de mi país. 

Por tanto, aquí estamos ante una dinámica: apoyo la tesis de acelerar las metas, lo cual significa un cambio en las estructuras económicas de mi propio país, pero no es de mi propio país, es del mundo. 

Aquí tenemos que tener en claro que, alrededor del petróleo, del carbón y del gas, hay un negocio, se mueve un inmenso capital que yo denomino capital fósil. Pesa sobre la humanidad. Es el mayor capital del mundo, además, hoy por hoy, se ha acumulado desde los años 70 y antes. 

Y actúa a través de nuestros países, de nuestros gobiernos, en la política, y por tanto en las Naciones Unidas, cambia el lenguaje y los objetivos. Y el objetivo, siendo la vida, cambia el horizonte de la vida, ni más ni menos. 

Por ejemplo, la palabra neta, que es usual en Naciones Unidas ¿Qué significa? Que se puede emitir gases, pero qué si se absorbe en la misma cantidad, el balance neto es cero, y eso no existe en el mundo. 

La capacidad de absorción natural del planeta, en sus océanos, en las selvas, va en caída, lo cual la palabra neta significa es que se está produciendo más petróleo y carbón. Miren los datos, es decir, estamos perdiendo la carrera de la vida. 

Luego, los datos del clima. Los datos que deberíamos usar, excluyendo la palabra neto, siendo más claros en el objetivo, es en cuanto disminuye el consumo del petróleo, del carbón, del gas cada año, y por tanto su extracción. 

Eso es lo que nos daría el horizonte en el tiempo suficiente y eficiente de poder superar la crisis climática, de otra manera, no lo estamos haciendo. El reloj va en contra de nosotros. 

En esa perspectiva, si estos fuesen así los números, ¿en qué podemos aportar? Los países que, como el mío, Colombia, pues están aquí sentados, no somos las grandes chimeneas que deben apagarse. 

Esas chimeneas son Estados Unidos, Europa y China y la India. Tienen que apagarse ¿Cuál es el proceso de transición en el tiempo eficiente para hacerlo? Allí se necesita una gran suma de dinero para lograrlo. Dinero que no es privado en su mayor parte. 

Ahora nosotros, Colombia, nosotros tenemos la selva, nosotros tenemos la esponja. Mientras en América está la chimenea en el norte, con gases fluyendo, en el sur está la esponja, cada vez más débil. 

Hemos propuesto con Brasil, con todos los países de la cuenca amazónica, revitalizar la selva amazónica. Si nos juntamos con el Congo y con Indonesia, tenemos la esponja del sur no suficiente, ojo. 

No puede reemplazar las tareas de apagar las chimeneas en el norte. Esas esponjas, para revitalizarlas, necesitan un dinero, reemplazar las actividades productivas depredadoras que allí se han ubicado. 

Nosotros hemos puesto 150 millones de dólares cada año durante 22 años. Esperamos que el mundo ponga otro tanto para salvar las esponjas. 

Dos, hemos eliminado totalmente el subsidio a la gasolina, nos parece que deben eliminarse completamente los subsidios a los combustibles fósiles en el mundo. 

Tres, nuestro gran problema es la adaptación, indudablemente porque sufrimos las consecuencias de las chimeneas que siguen prendidas en el norte, por eso a mí me parece que si en el sur están las esponjas, fuera del océano, y en África y en América del Sur están las grandes potencialidades de generación de energía limpia, por el agua, por el sol, por los vientos, por la geotermia, entonces, ¿por qué no se produce la energía limpia en el sur?, en una gran proporción, en África y en América del Sur, lo cual significa deslocalizar inversiones, fondos, lo cual significa deslocalizar producción del norte hacia el sur, lo cual significa prosperidad en el sur.

Y descarbonizada, una prosperidad social descarbonizada también en el sur, ahora esto significa otros grandes fondos, no cien mil millones de dólares, eso es, nosotros decimos popularmente un calado en la puerta de un colegio, grandes fondos. 

Y si continúo mi análisis, entonces tenemos que llegar a un tema central, los grandes fondos, que es la cantidad de cien mil millones de dólares, quizás con otro cero, quizás, ya no un uno, sino varios números hacia adelante, esos grandes fondos no provienen de los fondos privados de inversiones, que solo se mueven bajo rentabilidad. 

Esos grandes fondos tienen que ser públicos, no surgen de una caja que no existe, tienen que surgir de nuestros propios países y donde uno mira que podría haber una afluencia de fondos públicos, cero tasa de interés, es decir, propios de cada país, es solo si disminuye nuestro pago de deuda, porque allí se libera el recurso y nuestro pago de deuda se puede disminuir, tuvimos ya la experiencia concreta, si el Fondo Monetario Internacional lo hizo en tiempos del COVID, gira derechos especiales de giro, su moneda, a los dueños de la deuda que actualmente son en buena parte China, los fondos privados de capital del mundo, que son básicamente fondos de pensiones. 

No pierde nadie, algún fundamentalista neoliberal dirá, no crece la inflación en el mundo, porque se emite dinero, no, se emite dinero, recordaría yo a Keynes, pero se invierte en el gran plan Marshall de la vida, que es adaptar y reestructurar las economías mitigando, llegando a cero carbonos. 

¿Quién pierde en ello?, unos capitales, el gran capital fósil del mundo, el que se mueve aquí, incluso en este recinto, para que las medidas que tomemos no sean tan drásticas, para que el reloj se alargue, es decir, para que la vida se acorte, la política aquí tiene que dividirse, separarse esencialmente del interés económico. 

Por eso yo puedo, como presidente de Colombia, siendo el quinto exportador mundial de carbón y uno importante de petróleo, decir, nuestro país tiene que dejar de exportar carbón y petróleo, porque si no, no hay vida, ni fuera de nuestro país, ni dentro de nuestro país. 

Pregúntele a cualquier científico, ¿Qué pasa si Venezuela saca todo su petróleo de sus reservas?, ¿Y qué pasa si Colombia saca todo su carbón de sus reservas?, si ustedes aquí nos acompañarían en la próxima reunión y ninguno lo haría, porque esa cantidad de reservas mataría la vida en el planeta. 

Arroja un otro elemento que hace parte de las cuentas climáticas y entonces esos exportadores de petróleo inmensos, Rusia, Arabia Saudita, Venezuela si estuviera desbloqueada, etcétera, los grandes exportadores de carbón y de gas que hoy provocan guerras, porque la guerra de Ucrania es una guerra por el gas.

Pregunto yo, ¿no habría que colocar en las cuentas climáticas un fondo de compensación? ¿O dejan gratis enterrados sus yacimientos de carbón, de petróleo, porque sí, porque lo decidimos? 

Esas cuentas que son inmensas, compensar a los países productores de carbón, petróleo y gas, financiar la adaptación y las grandes esponjas y financiar la mitigación, que no van a provenir de un mercado privado de capitales, esas grandes cuentas sólo las podemos lograr si reestructuramos el sistema financiero mundial y logramos que el Fondo Monetario Internacional FMI pueda hacer la primera gran emisión de dinero en el mundo. 

Lo propuso Keynes (John Keynes - economista británico 1883 - 1946) en su momento, para el primer gran plan Marshall del mundo por la vida, es decir, el primer paso real después de 28 COPs, de empezarle a ganar la batalla a las emisiones efecto invernadero que pueden acabar con el planeta Tierra y que tienen un origen humano, que no es todos los habitantes, es el gran capital fósil del planeta al que hay que desvalorizar. 

Y esa valentía política debe ser decidida al interior de las Naciones Unidas. 

Gracias, muy amables.